CÓRDOBA: La escuela rural que fabrica instrumentos musicales

Mina Clavero. Maderas añejas, respaldos de bancos, una vieja aspiradora, guitarras y teclados rotos. Con eso, los alumnos del colegio rural y albergue José María Liqueno, en las alturas de la Pampa de Achala, construyen instrumentos musicales. A fin de este año, conformarán la banda de la escuela con los instrumentos que ellos mismos fabricaron.
Ubicada a más de 2.100 metros de altura, en el paraje La Ventana, sobre las Altas Cumbres y a 45 kilómetros de Mina Clavero, la escuela alberga hoy a unos 30 alumnos de esa zona serrana.
El proyecto de construcción, reparación y ejecución de instrumentos es guiado por el preceptor y profesor de artes visuales, Sergio Truszkowsky.
Encontré una guitarra abandonada y la reparé para poder tocar, los chicos se entusiasmaron con la música. Luego otro alumno trajo una guitarra rota e hicimos lo mismo, otro profesor les dio pautas musicales y se interesaron por tocar y por los procesos de reparación”, relata Truszkowsky.
Asimismo, yo quería armar un proyecto que tenga que ver con el reciclaje de elementos de la escuela, donde no llega ningún servicio de recolección de basura, había maderas muy estacionadas que se estaban echando a perder. Llevé herramientas y los chicos se engancharon, incluso los del primario”, apunta el docente.
De la nada, los chicos de la escuelita rural se transforman en luthiers.
Del hielo a la música
La escuela, creada en 1929, albergó durante décadas a chicos judicializados o alejados de sus familias. Fue noticia en 1986 cuando cuatro de sus alumnos perecieron congelados luego de escapar, supuestamente, a causa de malos tratos recibidos.
La historia fue contada desde 2007 por La Voz del Interior . Ese mismo año, la Justicia intervino el establecimiento y la Orden Franciscana de la Asunción, a la que pertenecía, lo cerró. Luego, la Provincia lo reabrió a pedido de los vecinos (el proceso se cuenta en el libro Los Niños de Hielo , del periodista Sergio Carreras, publicado en 2010).
El año pasado se abrió también el nivel medio, como anexo del Ipem 285 José Gabriel Brochero. Unos 20 alumnos cursan en pluricurso.
“Queremos cerrar el acto de fin de año presentando tres temas con nuestros propios instrumentos terminados, como forma de motivar también a los que quieran venir”, cuenta el preceptor.
“Ya casi termino de hacer un bajo, no fue tan fácil pero fue divertido y ahora quiero hacer una guitarra y aprender a tocar”, dice Mayid Barboza (14), de Mina Clavero.
“Estoy construyendo un bajo, me gustó la idea, además soy zurdo y no podía antes tocar otros instrumentos, este bajo será para zurdo”, expresa Eric Domínguez Cuello (11), de Pampa de Achala.
Hay más. Carlos Miguens (18), de Santa María de Punilla, acota: “Me gusta el taller y quiero aprender a tocar, hicimos una guitarra con un respaldar de silla y parte de una cama vieja; le agarramos cariños a los instrumentos que hacemos”.
“El proyecto es integral”, agrega Truszkowsky. “Para calcular el diapasón de una guitarra tienen que usar matemática, física, disciplina de trabajo, son procesos que no son inmediatos. Y desarrollan habilidades que después les pueden servir para otra cosa”, acota con sentido docente.
Cómo colaborar
Albergue. Los alumnos se albergan en la escuela rural de montaña de lunes a viernes, durante el ciclo lectivo. Los fines de semana regresan a sus hogares. Todos provienen de familias de escasos recursos. El colegio cuenta con paneles solares, grupos generadores, termotanques a gas y se abastece de una vertiente. Actualmente no cuenta con acceso a Internet por una rotura del servidor que provee el servicio.
Necesidades. Para continuar con el proyecto de taller de instrumentos, la escuela necesita herramientas de carpintería de mano (cepilladora, formones, gubias, serruchos, sierras, martillos de goma, morsa, taladros, amoladoras, un banco de carpintero). Actualmente, trabajan sobre una mesa de metegol modificada. También insumos específicos para instrumentos eléctricos: micrófonos, pastillas de guitarra y bajo, trastes, clavijas, cuerdas, laca, pinturas, lijas e impregnantes.
FUENTE: Diario La Voz

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